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¿Por qué recurrir al tratamiento de sustitución renal?

Si sus riñones ya no son capaces de limpiar su cuerpo de toxinas ni de eliminar el exceso de agua, hay diferentes opciones de tratamiento disponibles para prolongar su vida y diversas maneras de mantener su calidad de vida en la mayor medida posible.

No deje que le asuste la terminología que no conoce. Su médico le explicará sus opciones de tratamiento con un lenguaje fácil de entender.

Consejo: cuanto más informado esté en las conversaciones con su médico, mejor podrá seguir las explicaciones y hacer preguntas.

En nuestra página de Mis opciones de tratamiento encontrará una descripción general de las opciones de tratamiento más comunes.

Encontrar la mejor opción

Cada tipo de tratamiento tiene sus propias ventajas y desventajas, y no todos los tratamientos pueden ser adecuados para usted. Junto con su médico, usted decidirá qué tratamiento se adapta mejor a su situación personal. Para este propósito, deberá reunirse con él para hablar detenidamente sobre su salud física, la evolución de su enfermedad, su entorno doméstico y sus propios deseos y necesidades.

Después de la conversación, tendrá tiempo para pensar en sus opciones y decidir la opción de tratamiento más adecuada para usted. Trate de involucrar a sus familiares y amigos en esta conversación.

Breve descripción de las opciones de tratamiento

Diálisis

Tratamiento para la insuficiencia renal que elimina toxinas no deseadas, productos de desecho y exceso de líquido filtrando la sangre. Se realiza periódicamente de 3 a 7 días por semana, según su estado de salud y su tratamiento.

Trasplante

Cirugía mayor durante la cual un paciente con insuficiencia renal recibe un riñón nuevo, ya sea de un donante vivo o fallecido.

Tratamiento conservador

Centrado en mantener su calidad de vida, no en prolongarla. El tratamiento está destinado a aliviar las molestias y el dolor que provocan los síntomas de la insuficiencia renal, como la hinchazón y la disnea.

A continuación, le proporcionamos información general sobre cada una de las opciones de tratamiento. No se preocupe, por ahora, no es necesario que comprenda todo en detalle. Intente aprender todo lo que pueda sobre las principales características de cada tratamiento. Puede decidir junto con su equipo médico, así como con la ayuda de sus familiares y amigos, la opción de tratamiento más adecuada.

Trasplante de riñón

Un trasplante puede considerarse el tratamiento de sustitución renal óptimo siempre que sea adecuado para el paciente.

Si hay disponible un riñón de un donante adecuado (ya sea de un donante fallecido o vivo) y las pruebas realizadas indican que el riñón es compatible con el paciente, se puede realizar el trasplante. Un solo riñón suele ser suficiente para mantener la función de filtrado. Después del trasplante, se deben tomar medicamentos que inhiben el sistema inmunitario para que su cuerpo acepte bien el nuevo riñón. También se prescriben otros medicamentos para que el trasplante curse sin problemas.

Desafortunadamente, el tiempo de espera para un riñón de un donante puede demorarse considerablemente y, además, encontrar un donante adecuado puede ser muy difícil, por lo que suele ser necesario el tratamiento de diálisis para salvar ese tiempo.

Diálisis

La diálisis es la opción más común para tratar la enfermedad renal avanzada. Representa una sustitución de las diferentes funciones del riñón humano. Junto con su médico encontrará formas de integrar el tratamiento en su vida cotidiana.

Diálisis peritoneal

El término diálisis peritoneal (DP) deriva del término peritoneo, que describe la delgada estructura protectora alrededor de los órganos abdominales. Es un espacio cerrado único en el abdomen, la cavidad abdominal.

En la diálisis peritoneal, el peritoneo se utiliza como filtro natural para limpiar el cuerpo de los materiales de desecho y el exceso de agua. Esto requiere un catéter de DP creado quirúrgicamente.

La diálisis peritoneal se puede llevar a cabo de forma independiente en casa o en cualquier otro lugar adecuado.

Hemodiálisis

En los procedimientos de hemodiálisis (HD), la sangre se limpia fuera del cuerpo utilizando una máquina especial y un filtro artificial, llamado dializador. Para ello, es necesario crear quirúrgicamente un acceso vascular. Durante el procedimiento, la sangre sin toxinas se devuelve al paciente.

Durante el tratamiento, la cantidad de sangre que está fuera de su cuerpo, es el equivalente a 250-260 ml. Un adulto medio tiene entre 4 y 5 litros de sangre en el cuerpo, y puede tolerar fácilmente esta pequeña cantidad fuera de su organismo.

Hemodiálisis domiciliaria

La hemodiálisis domiciliaria (HHD) se realiza en su propia casa o en cualquier otro lugar adecuado utilizando la misma técnica que la HD, con ciertos ajustes. Para ello, es necesario tener los dispositivos en casa y disponer de los conocimientos necesarios para llevar a cabo el tratamiento. El paciente y el cuidador necesitarán realizar un programa de entrenamiento previo en su centro de referencia.

El equipo médico asistencial está disponible por teléfono, siempre que sea necesario. El paciente tiene más flexibilidad a la hora de realizar su tratamiento.

 

Tratamiento conservador

Usted tiene derecho a tomar sus propias decisiones en cuanto a la forma de tratar su insuficiencia renal y, del mismo modo, tiene la opción de no iniciar o suspender la diálisis o un trasplante. Con el tratamiento conservador, su equipo médico multidisciplinar continuará proporcionándole la atención necesaria sin diálisis ni trasplante de riñón. Tan solo se tratarán los síntomas con medicación y, si es necesario, mediante una forma de apoyo nutricional. El tratamiento conservador no cura la enfermedad renal y no se considera una medida para prolongar la vida. Los pacientes con insuficiencia renal completa morirán si no reciben un tratamiento de sustitución renal, como la diálisis o el trasplante.

Obtenga más información acerca de cómo crear su red de apoyo personal en la siguiente sección.